El alfajor de maicena es una receta infaltable en la pastelería argentina. La utilización del Bicarbonato de sodio Alicante resulta indispensable en la preparación, ya que permite que la masa quede ligeramente aireada y crujiente.
Batir la manteca (debe estar a temperatura ambiente para que sea más fácil trabajarla) con el azúcar hasta obtener una crema algo blanca.
Agregar las yemas de a una e ir integrándolas bien con ayuda de un batidor de alambre o batidora eléctrica.
Perfumar la preparación con Esencia artificial de Vainilla Alicante y ralladura de limón.
En otro bowl, mezclar la harina, el almidón de maíz y el Bicarbonato de sodio Alicante y luego pasarlos por un colador fino o un tamiz para no añadir grumos cuando se mezclen los secos a la preparación anterior.
Incorporar la mezcla de los secos ya tamizados a la crema de manteca y azúcar y formar una masa (no se tiene que amasar para no añadir calor con las manos a la manteca, sólo se deben unir todos los ingredientes).
Envolverla en papel film y dejarla en la heladera por 30 minutos.
Una vez que la masa esté fría y más sólida, espolvorear la mesada con harina y estirarla con ayuda de un palo de amasar hasta lograr tener una masa de 1/2 cm aprox.
Cortar los alfajorcitos con ayuda de un cortante redondo (también se puede usar un vaso o copa).
Colocarlos sobre una asadera limpia (no hace falta enmantecarla ya que la masa tiene mucha manteca).
Llevarlos a horno precalentado a temperatura media (160 C) durante unos 10 minutos o hasta que estén levemente dorados.
Retirar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla
Una vez fríos, colocar dulce de leche en una tapa y por encima la otra. Pasar los bordes por Coco rallado Alicante y ya están listos para disfrutar.
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