Salsas, sopas, pollos, carnes, vegetales y postres. Tiene un sabor cálido, dulce y aromático va bien tanto en platos dulces como salados. Agregala siempre al final de la cocción, ya que el calor disminuye su sabor. Es infaltable en la salsa blanca y también le da un toque especial a las verduritas salteadas con pollo. Cantidad recomendada: 1 cucharadita.